Se aprende más de los fracasos que de los éxitos. Es una frase típica y tópica, pero que en el caso de Dinantia es una realidad. Esta plataforma de comunicación entre escuelas y padres ha llegado además de 250.000 familias, pero su origen se puede considerar un fracaso. Por muchos será una aplicación desconocida, pero por personas con hijos en la escuela puede ser la herramienta que más utilicen.
Cristian Cisa y Borja Berenguer impulsaron el 2012 una aplicación que planificaba los menús semanales. Se decía Menuterraneus y quería fomentar una alimentación saludable y equilibrada. Pero no tuvieron los resultados esperados: "Creímos que tendríamos un gran éxito y ganaríamos dinero con la publicidad".
Cristian Cisa: "Lo hacemos casi todo mal y cometemos casi todos los errores que no se tienen que cometer"
Pero no fue así. A pesar de tener decenas de miles de descargas, no encontraron el modelo de negocio para hacer rentable el proyecto. "Lo hacemos casi todo mal y cometemos casi todos los errores que no se tienen que cometer", recuerda Cisa.
Una aventura a la desesperada
Los dos habían invertido mucho dinero, que habían conseguido a través de inversiones de familiares y amigos. Por eso, querían trabajar hasta el último momento para conseguir que funcionara: "A la desesperada fuimos a hablar con escuelas, por si los interesaba para diseñar sus menús". Y se encontraron un no rotundo. Pero de aquel no, surgió la oportunidad.
En una de las escuelas que visitaron y vieron la aplicación, les llamó mucho la atención su funcionamiento y cómo se enviaban notificaciones diarias. "Les interesó mucho la comunicación, pero no para informar de menús, sino para cuestiones de la escuela con las familias", explica Cisa.
Entonces, la comunicación en las escuelas era básicamente a través de correos electrónicos y era caótica y poco eficiente. había pocas alternativas. "Nosotros también éramos padres y vimos que era una buena idea. Todo el mundo tiene el correo electrónico en el móvil, pero recibimos muchos mensajes y el de la escuela te puede quedar sepultado. Y esto era una aplicación para recibir mensajes directos de la escuela y poder enviarlos", resume. Hablaron con alguna escuela más y vieron que tenía salida.
Escuela a escuela y Al Pacino
Lo primero que hicieron fue hablar con los amigos y familiares que les habían dejado parte del dinero para ver si querían recuperar lo que quedaba o apostaban por el nuevo proyecto. Y les hicieron confianza. Fue en verano de 2015 y en tres meses ya tenían esbozos y maquetas del producto, cosa que en la anterior aplicación tardaron mucho más.
En octubre de 2015 visitaron una feria de tecnología y educación y fueron con una maqueta de la plataforma. "Atrajimos la atención de cuatro o cinco escuelas, que fueron los primeros clientes". En seis meses ya facturaron más con Dinantia que con tres años con Mediterraneus.
Y la manera de crecer los primeros meses fue sencilla: a partir de llamadas a escuelas. Cada día llamaban a decenas de centros. Recordando Al Pacino en Un domingo cualquiera, "escuela a escuela". Hoy en día todavía utilizan esta estrategia cómo una de las bases para conseguir nuevos clientes y pueden llegar a hacer 50 llamadas al día.
Un crecimiento lento, pero constante
El 2016 ya tenían una cincuentena de escuelas como clientes y desde entonces el crecimiento ha sido constando, pero lento: "En el mundo del software, todo el mundo espera una curva de crecimiento muy pronunciada, pero no ha sido nuestro caso. Hemos crecido un 25-30% anual, que para empresa una normal es mucho, pero no por una startup".
A pesar de que tardaron tres años en ser rentables, no tuvieron dudas del proyecto. Cada año incorporaban más de un centenar de escuelas, lo que les hacía mantener la confianza. Hoy ya son unas 800 por Catalunya, España y algunas en Perú y México. Su plataforma ha llegado a unos 280.000 alumnos.
La revolución de la comunicación en las escuelas: adiós al WhatsApp
Notas a agendas que no se enseñan, cartas que se pierden o correos electrónicos que ni se abren. La comunicación con las familias es uno de los dolores de cabeza de las escuelas y Dinantia ha puesto orden. Al principio ofrecía un servicio básico para enviar mensajes en las dos direcciones. Pero ha ido ampliando más servicios y ahora también sirve por control de asistencia, hacer pagos de cuotas o excursiones, hacer encuestas, adjuntar autorizaciones o como calendario.
Cisa: "Las escuelas tienen un problema de comunicación"
Y es también una herramienta que puede evitar el mal trance de algunos padres con los temidos grupos de WhatsApp de familias. "Las escuelas tienen un problema de comunicación y, hoy en día, muchas familias están en grupos de WhatsApp porque es la manera más sencilla y efectiva de enterarte de cualquier mensaje de la escuela", explica Cisa.
Dinantia mejora la comunicación con los padres y, si lo quieren, ya no tendrán la necesidad de ser en estos grupos para informarse. Además, en la plataforma no se pueden enviar mensajes entre familias. Y los maestros también pueden determinar horarios para recibir notificaciones, además que las familias no sabrán su correo o teléfono. Cisa tiene claro que los grupos de padres seguirán existiendo por varios motivos, pero ya no serán la vía para informarse de lo que dice la escuela.
Lucha contra el acoso
Además, Dinantia también se ha centrado en ayudar a detectar casos de acoso. Tiene una funcionalidad que permite enviar mensajes anónimos al encargado de la escuela para alertar de alguna situación de acoso. Unas denuncias anónimas que pueden ser de gran utilidad en estos casos.
Desde el 2022, Dinantia forma parte de LiveKid , una plataforma polaca que ofrece un servicio similar pero en escuelas cuna. Con esta unión ahora quieren dar un paso todavía más grande a Latinoamérica, empezando por México.
Pero Cristian Cisa tiene claro que en el Estado español todavía hay mucho margen de crecimiento. Hay unas 30.000 escuelas y por ahora Dinantia está en 800, la gran mayoría en Catalunya. El futuro puede ser muy grande.