Música, películas, series, documentales, videojuegos. El número de contenidos a los que podemos acceder evoluciona cada día junto con una estadística que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha relacionado y puesto especial énfasis: más de 1.000 millones de personas de entre 12 y 35 años se encuentran en riesgo de sufrir pérdida de audición debido a la exposición prolongada y excesiva a un volumen excesivo al reproducir estos contenidos. Por lo general, parece que no estamos protegiendo nuestros oídos. Pero, ¿disponemos de los medios para hacerlo?
Hace siete años, José María Plana y Piedad Díez pensaron que no y, por este motivo, decidieron cofundar Kiversal con el objetivo de fabricar productos médicos de diagnóstico auditivo. “Estamos dando el mismo salto que llevaron a cabo las primeras generaciones de telefonía móvil a los smartphones, pero con productos de diagnóstico médico, ofreciendo más conectividad, más facilidad de uso, y capacidad de conectarse a la nube” explica Plana a VIA Empresa.
Más de 1.000 millones de personas de entre 12 y 35 años se encuentran en riesgo de sufrir pérdida de audición
La llegada de los audiómetros inteligentes
El cofundador, que hasta 2016 había estado trabajando en empresas de electromedicina, decidió contactar con Díez, quien conoció hacía unos años cursando un máster en dirección de empresas, para arrancar el proyecto. Fue entonces cuando presentaron el plan de negocio a Barcelona Activa con el que accedieron a su incubadora y, con la ayuda de un ingeniero, desarrollaron uno de sus productos estrella: el Audixi 10, la gama de audiómetros inteligentes.
A finales de 2019, el equipo de Kiversal, que actualmente está compuesto por siete personas, consiguió la autorización para lanzar sus audiómetros al mercado, lo que supuso un punto de inflexión. "Se trata de un producto regulado que necesita una aprobación previa antes de poder ser comercializado", detalla Plana. Aun así, este hecho coincidió prácticamente con el inicio de la pandemia, convirtiéndose en “un frenazo importante”, del que se recuperaron “creciendo a base de buscar clientes internacionales”. Y así fue: el Audixi 10 ya ha llegado a países de Latinoamérica y del sudeste asiático.
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Descubre la pantalla del audiómetro #Audixi 10:
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“Nuestro audiómetro es lo suficientemente inteligente para poder transferir su pantalla a un servidor web a partir del cual poder controlar y realizar audiometrías remotas por videoconferencia”, apunta Plana, quien añade que con esta solución, que en la actualidad conecta el Hospital del Mar con el Hospital de Vielha, "las audiólogas se ahorran subir a Vielha cada semana y, por supuesto, los pacientes no deben bajar a Barcelona".
Una de las 20 empresas más innovadoras de Europa
Esta innovación hizo que el European Innovation Council aceptase a Kiversal en MEDICA, la feria más importante del mundo en el ámbito de las tecnologías sanitarias. De esta manera, el equipo liderado por Plana y Díez se ha convertido en una de las 20 empresas más innovadoras en Europa en el ámbito sanitario. Y es que Kiversal no ha dejado de innovar. El año pasado, inició un proyecto del Ministerio de Ciencia en colaboración con el Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona “para hacer algo que nunca se ha hecho”: un cribado poblacional de salud auditiva.
Kiversal cerró 2022 con una facturación de 350.000 euros
Pese al frenazo causado por la pandemia, la firma se encuentra en un buen momento y espera seguir creciendo "a base de aumentar producto y de ganar licitaciones", detalla Plana. Kiversal cerró 2022 con una facturación de 350.000 euros, y este año proyecta llegar al medio millón.
Democratizar el diagnóstico audiológico
En la actualidad, la iniciativa está desarrollando un sistema de audiología basado en la cancelación activa que pueda implementarse en los centros de atención primaria sin la necesidad de utilizar cabinas insonorizadas. "Queremos democratizar el diagnóstico audiológico en los centros de atención primaria, algo que hoy en día no se está cubriendo", apunta Plana.
El cofundador detalla que este hecho tiene un impacto especialmente importante en las personas mayores, porque "las mejoras en la sordera y en la capacidad auditiva pueden evitar ciertos tipos de demencia, ya que poder escuchar reduce el deterioro cognitivo", añade. Una solución a tener en cuenta en un contexto en el que “cada vez hay más población senior”.
Después de siete años “haciendo muchas cosas con muy pocos recursos”, Plana se siente orgulloso del trabajo realizado: empezaron montando sus propios sistemas informáticos que les han permitido, entre otros, conseguir patentes a escala europea. Aun así, el cofundador destaca que el principal aprendizaje de este proyecto ha sido mejorar su capacidad de adaptación y solucionar problemas, mediante un producto que mejora la vida de las personas.