Carecer de un plan de transformación digital no es una opción para un tejido empresarial que aspira a crecer. La capacidad de adaptación de las empresas a las últimas innovaciones tecnológicas acontece clave a la hora de encarar las exigencias del mercado actual y de las demandas de sus consumidores, y el ecosistema empresarial catalán lo tiene cada vez más claro: el 79% de las empresas tienen iniciativas de transformación digital en marcha. Así, el comercio ha sido uno de los sectores que más involucrado se ha visto en esta transformación, convirtiéndose en un canal que usa el 82% de los consumidores catalanes.
Aun así, lo que para la ciudadanía supone un gran avance, para algunas empresas es todo un reto. Por este motivo, surgen iniciativas como Stockagile, que mediante la innovación tecnológica se propone "maximizar la rentabilidad de los minoristas": "Ayudamos a las empresas a aumentar las ventas, evitar roturas de stock, optimizar las operaciones, aumentar la rapidez en la entrega de los pedidos y, en muchas ocasiones, evitar errores humanos", señala a VIA Empresa el CEO y cofundador de la iniciativa, Miquel Subirats, detallando el objetivo que se propuso junto con su hermano, Joan Subirats, socio y cofundador de Stockagile: "Transformar la forma en que el comercio minorista trabaja a escala mundial mediante la innovación tecnológica".
El 82% de los consumidores catalanes ya realiza sus compras en entornos digitales
Más de 500 clientes con cerca de 1.200 tiendas
Este software se trata de un sistema de planificación de recursos empresariales (ERP) que contó con un programa de mentoría de Barcelona Activa, y dentro del ámbito de esta tipología de programas se diferencia por estar enfocado en el mundo del comercio minorista. Más de 500 clientes que suman cerca de 1.200 tiendas han apostado por esta herramienta, que promete reducir los costos en un 30%, multiplicar por tres el tiempo de entrega, aumentar un 5% las ventas y ahorrar hasta un 40% de tiempo.
Los hermanos Subirats, que llevaban más de 15 años vinculados a los sectores del software y del comercio minorista, vieron una oportunidad: "Las pymes tenían pocas opciones modernas, o hacían una inversión económica muy grande, o no disponían de un software moderno", explica el empresario, quien detalla que el proyecto arrancó en enero de 2021 "con la ayuda de los primeros retailers que encontramos dispuestos a trabajar con nosotros. Empezamos co-creando el proyecto con ellos".
Desde marcas reconocidas hasta tiendas de barrio
Desde entonces, el equipo de Stockagile ha evolucionado hasta contar con 22 personas y ya tiene todo tipo de clientes, desde marcas reconocidas en todo el Estado hasta tiendas de barrio, dedicadas principalmente al ámbito de la moda, los complementos o la cosmética. Destacan casos de éxito como Shon Mott, Blaw Store, Dogos o Mushitek, que, al igual que más de 500 firmas, han confiado en este software impulsado por los hermanos Subirats.
El software ofrece tres planes, de los cuales uno es gratuito y sirve para probarlo, y, por otro lado, está la tarifa Grow que tiene un coste de 79 euros al mes (65,8 con la suscripción anual) y la tarifa Enterprise, que se trata de un plan personalizado según las necesidades del cliente. "El 2024 se presenta como el año de la consolidación como el software referente para las medianas empresas de retail que tengan múltiples canales de venta y necesiten una solución tecnológica pensada para maximizar su rentabilidad", comenta Subirats.
Subirats: "Como emprendedor es fundamental no empezar a hacer nada sin haber validado que solucionas un problema real a alguien"
Después de casi tres años dedicándose plenamente a su proyecto, el emprendedor valora el gran aprendizaje de escalar un equipo "teniendo los recursos y las bases necesarias. En caso contrario, puede suponer mucha ineficiencia". "Que tengas dinero no significa que puedas escalar rápidamente tu equipo, debes hacerlo cuando los diferentes roles que necesitas estén preparados para hacerlo". Aun así, Subirats subraya la importancia de cumplir una premisa fundamental antes de plantearse estas cuestiones: "Como emprendedor es fundamental no empezar a hacer nada sin haber validado que soluciones un problema real a alguien".
