Calleja, la sonrisa de Roig y "los ojitos" de Boluda

El encuentro empresarial sobre Corredor Mediterráneo celebrado en València deja una sensación de extraña 'normalidad'

Nube de periodistas alrededor del ministro Ábalos a Valencia | NNiG Nube de periodistas alrededor del ministro Ábalos a Valencia | NNiG

Habían dicho en la Asociación Valenciana de Empresarios hace unos meses que la cita de noviembre sería en Madrid, pero el segundo Chequeo del Corredor Mediterráneo finalmente se ha celebrado en casa. Aquí, como dice el ministro valenciano José Luis Ábalos, ya sabemos de qué va la cosa. Los agricultores que recogen estos días las naranjas de nuestros campos también saben que no es lo mismo transportarlas en camión que en ferrocarril, como recuerda Federico Félix, un empresario de los que opina con espontaneidad y contundencia. De los que envía mensajes claros. Que en tiempo de tantos juegos de palabras también es de agradecer.

En el Palacio de Congresos de València la puesta en escena parece de otro tiempo, pero nada es lo que parece. Toma de temperatura en la entrada, separación entre sala de prensa y asistentes por aquello del aforo, gel hidroalcohólico por todas partes y mascarilla, mucha mascarilla y de todos los colores.

Entrada al recinte del Corredor Mediterrani | NNiG
Entrada al recinto del Palacio de Congresos | NNiG


El resto, el ambiente de cumbre empresarial, con esa innegable reticencia a destacar que suelen tener los empresarios, se respira por todas partes. Y eso que en este mismo escenario, hace ahora ya dos años, Juan Roig ya le dijo a sus colegas que era hora de salir del armario… Sabemos que presumir de buenas noticias no es fácil, pero los que intentamos encontrar luz entre las rendijas de la oscuridad de la crisis, agradecemos el dividendo justamente repartido, la expansión, la misión empresarial concluida con éxito.

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La presentadora del acto, la valenciana de dicción perfecta Maribel Vilaplana, busca también esta luz en su rol de conductora de un viaje que analiza las mejoras de las obras del tercer carril. Suyo es este "los ojitos de Boluda" cuando busca entre el patio de butacas el ánimo positivo de los empresarios que, lógicamente, están preocupados por lo que está pasando. Roig se baja la mascarilla y muestra la sonrisa, como calmando los ánimos… una especie de "sí, está bien". No lo vemos en directo, pero por suerte el realizador ha sido rápido en la retransmisión del gesto del magnate de Mercadona. Instalados en la sala de prensa, los periodistas seguimos en pantalla de cine lo que pasa en la planta de abajo… una pena, todo hay que decirlo, porque el plasma tan criticado al expresidente Mariano Rajoy es ahora una costumbre que nos hace perdernos cosas, cositas… las que dan titulares, digamos.

Calleja, Jesús de nombre, acompaña a Vilaplana en la conducción y le da ese toque televisivo que ya adoptó el encuentro con la campaña Es de risa que saltó al teatro o con la presentación en Alicante en formato talk-show. Bien cierto es que explicar la ejecución de una obra ferroviaria para llegar al gran público no es fácil, de forma que no le quitamos mérito al presentador. Entre comentarios, recuerda que ya están iniciadas las obras de Valencia-Xàtiva-La Encina, las de la entrada en Cartagena, las de Murcia y Almería, pero la más importante de este año es el funcionamiento del tramo Tarragona-Vandellós.

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Nos lo confirman los ingenieros, que revisan las obras, con estudios, análisis de prensa e incluso "espias" sobre el terreno, Xavier Lluch y Francisco García Calvo. Los abordo en la sala de prensa, cuando la nube mediática por la llegada inminente de Ábalos está haciéndose cada vez más grande. ¿Cómo va la cosa?, pregunto. Y me sorprende verlos optimistas: ¡por fin, lucecitas en el túnel! "Avanzan las obras, en Tarragona se ha ganado mucho… pero en Murcia ahora la cosa está parada… mucho", es el resumen. Con el deadline del 2025 sobre la mesa -a pesar de la actitud poco contundente en plazos del ministro- planea la duda de si llegaremos. Fuentes muy solventes me apuntan que el Corredor Mediterráneo, para la gente de Europa, acaba en Sagunto. Bien es verdad que como valenciana no sé si suspirar… o llorar. Veremos.

En una semana -¡o un mes!- en que salto de streaming en streaming, ver a las fuentes, los protagonistas de las noticias, hacer periodismo en persona, da alegría. La directora de EDEM, Hortensia Roig haciéndole fotos con confianza a Antonio Garamendi, presidente de la CEOE; Boluda saludando a Jesús Navarro, de la empresa de especies Carmencita; el presidente valenciano Ximo Puig y Juan Roig, dos hombres de altura, rodeados de periodistas ávidos de declaraciones; el amo de Chocolates Valor, Pedro López, entrando tarde en la sala de prensa…

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Puig, Félix, Roig, Boluda y Garamendi, a la entrada del Palacio de Congresos | Cedida

 

Son muchos los que asisten al acto: José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia, José Vicente Morata, presidente de la Cámara de comercio; Salvador Navarro, vicepresidente de la CEOE y presidente de la CEV, Isabel Pardo, presidenta de ADIF; Inma Riera, directora general de la Cámara de comercio España; Josep Sánchez-Llibre, presidente de Foment del Treball o Ramon Talamàs, presidente de la Cámara de comercio de Terrassa que ha compartido en Twitter nuestro artículo (¡gracias!) y me ha confirmado que había venido, yo tengo que decir no lo había visto.
 

No he conseguido coincidir con el Comisionado de España para el Corredor, Josep Vicent Boira, al cual quería preguntarle qué piensa sobre el Corredor verde y digital que hace unos días la Fundación Conexus ha explicado que quiere potenciar entre Madrid y València. Tampoco me pude quedar con los gestos de todos: entre la mascarilla, la distancia y el alejamiento periodístico, en esta crisis estamos perdiendo mucho. Incluso algún tren.

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