Cuando Ángel Sáenz de Cenzano (Madrid, 1972) aterrizó en LinkedIn como director general en España y Portugal, allá por 2019, la plataforma ya estaba consolidada como la gran red social empresarial del mundo. Los 14 millones de usuarios de entonces que tenía entonces en el Estado hoy ascienden a 23 millones. Aunque casi todo lo que queda del LinkedIn de aquella época es, probablemente, su propósito fundacional.
Conectar a las empresas con el talento y los profesionales hoy es diferente que en aquel entonces. Gran parte la culpa la tiene, como viene siendo habitual, la irrupción de la inteligencia artificial. Sin embargo, Sáenz no ve la IA como un peligro; más bien, aspira a utilizarla como un trampolín para mejorar su servicio a las empresas y trabajadores que dependen de LinkedIn. Y, de paso, también para corregir algunas incorrecciones como la ausencia de idiomas como el catalán o el euskera en la plataforma. Una circunstancia que, según confiesa a VIA Empresa, la plataforma no tiene previsto atender próximamente.
Ya estamos casi en 2026. ¿Cómo sirve hoy LinkedIn a las empresas?
En 2026 nuestra compañía cumplirá 23 años, y durante este tiempo ha evolucionado mucho el uso por parte de las empresas. En nuestro caso, seguimos fieles a nuestra visión original, que es generar oportunidades económicas a los profesionales. A partir de ahí, hemos añadido nuevas funcionalidades a nuestros miembros: desde conectar con su entorno profesional a encontrar oportunidades laborales, pero también buscamos que los profesionales puedan aprender e informarse para estar al tanto de lo que está sucediendo en sectores de su interés.
¿Ha ayudado LinkedIn a que las empresas sean más transparentes?
Me gusta ese enfoque. Desde luego, ha ayudado como canal de comunicación y como ventana al mundo profesional. Las empresas han podido comunicarse de una forma natural tanto a sus empleados, como a sus socios, su ecosistema y, en general, a todo el mundo profesional. Esa posibilidad ha provocado que las compañías tengan un deseo de contar más cómo son por dentro, cómo funcionan, cuál es su cultura, su propósito o resultados.
¿Y a la digitalización también han contribuido?
Bueno, sí, aunque tampoco pretendemos darnos los méritos. Nosotros somos producto de la digitalización. Lo que sí hacemos es posibilitar que las empresas consigan sus metas mediante mecanismos digitales. Me refiero a objetivos de identificación y captación de talento, objetivos internos de desarrollo del propio talento, de comercialización, de marketing... De todo ello sí, sin duda.
"Son pocas ya las empresas que no enfocan cierto nivel de estrategia a la participación, presencia y comunicación de sus directivos y profesionales en la red"
Usted llega al cargo de director general en noviembre de 2019. Seis años después, ¿cómo ha evolucionado LinkedIn?
Para empezar, hemos crecido. Cuando me incorporé, nuestra cuota de miembros era de 14 millones, que no estaba mal, y ahora estamos a punto de alcanzar los 23 millones. Es decir, hay una mayor incorporación, y además de un rango mayor, tanto generacional como sectorial. Esto es muy interesante, porque uno de los objetivos estos años ha sido que de verdad la red pudiese aportar valor transversalmente a todos los sectores. Es evidente que venimos de una presencia fuerte en ramas clásicas como la tecnología, la consultoría, finanzas... Pero en estos años hemos ido ampliando esas conversaciones y ese interés en la red en otros sectores. Ahora llegamos al agroalimentario, retail, sanitario e incluso uno de los más pujantes actualmente como el de la defensa. Esa quizás es la mayor alegría en cuanto a desarrollo en estos seis años, en parte también muy impulsada por nuestro propio equipo editorial.
Por otra parte, también destaco el hecho de contar cada vez con más confianza de los profesionales. Aquella actividad de profesionales ejecutivos que hace unos años se veía como algo disruptivo, novedoso o de casi héroes, ahora mismo se ha convertido en una cosa muy común. Son pocas ya las empresas que no enfocan cierto nivel de estrategia a la participación, presencia y comunicación de sus directivos y profesionales en la red.
Hasta hace unos años, Twitter -hoy X- era el gran referente informativo en cuanto a redes sociales. ¿Le han ganado esa batalla en la actualidad?
No es una batalla que nosotros hayamos querido librar. Y tampoco somos un medio de comunicación. De hecho, somos una plataforma que es complementaria a los medios, y trabajamos con ellos de una forma muy natural. Es verdad que tenemos un equipo editorial, pero no es comparable a cómo trabaja un medio de comunicación tradicional, ya sea físico o digital. Nuestro equipo hace agregación de noticias y las expone, aunque también las genera. Quizás esto es lo característico, que puede formar conversaciones sobre temas de actualidad en las que participan desde los miembros identificados a los verificados, por lo que eso aporta un carácter quizá algo más formal.
Las otras redes han evolucionado de otras formas, pero tampoco estoy aquí para juzgarlo. Yo he usado Twitter y lo sigo usando para ciertas cosas. Creo que también tiene su utilidad; en general, cada red social tiene su objetivo y su utilidad propia. La nuestra es una plataforma donde mantenerse actualizado de un modo genérico, lo cual es complementario a otras propuestas.

Desde el punto de vista informativo, ¿su apuesta de futuro es mantener el formato actual o van a atreverse un poco más?
Debemos evolucionar e innovar siempre. No sé cuánto tiempo lleva en LinkedIn, pero habrá visto una evolución, pero siempre de una forma natural y asumible para usted como miembro. Entonces, el LinkedIn de dentro de cinco años seguro que será muy diferente al que tenemos ahora. Ahora bien, lo que es casi seguro también es que vamos a seguir cumpliendo la misión de conectar a los profesionales para hacerlos más productivos y para que encuentren oportunidades. Las necesidades de profesionales que identifiquemos, intentaremos cubrirlas. Igual que en 2015 o 2016 detectamos que los profesionales querían formarse online, vimos las opciones y adquirimos una compañía en ese momento puntera, Lynda, que transformamos en nuestra plataforma formativa para profesionales. Hoy ya tiene más de 23.000 cursos de todas las temáticas y con una gran amplitud de idiomas.
En este momento, no cabe duda que estamos en un momento singular en cuanto cómo la tecnología, en este caso la IA, está inundando todo lo que hacemos y cómo lo hacemos. Nosotros llevamos muchos años trabajando en algoritmos y con la IA, pero ahora mismo las oportunidades y las capacidades que nos presenta la tecnología son mayores. A partir de ahí, si tenemos que reinventarnos y crear servicios nuevos, lo haremos.
¿De qué modo lo harán? ¿Tienen algún plan para integrar la IA?
Como le digo, llevamos años trabajando con servicios algorítmicos de inteligencia artificial. En total, son más de 600 o 700 simultáneamente. Pero ahora mismo se está produciendo un cambio de paradigma; le estamos dando la vuelta al asiento y estamos poniendo en manos de nuestros clientes y miembros las herramientas. En este caso, les ofrecemos agentes de IA para que tengan un salto cualitativo y cuantitativo en cuanto a lo que consiguen alcanzar en la red.
Le pongo un ejemplo: en septiembre lanzamos el LinkedIn Hiring Assistant, el primer agente de búsqueda, contacto y contratación de talento. Muchos de nuestros clientes ya están utilizándolo activamente para alcanzar perfiles que no estaban alcanzando con las búsquedas habituales. De esta manera, pueden contactarlos y seguir el proceso de una forma automatizada y muchísimo más productiva. Además, pueden eliminar tareas repetitivas de los reclutadores que no aportaban valor y les bloqueaban. En paralelo, estamos lanzando agentes similares para nuestra plataforma de formación o la de marketing, de forma que puedan diseñar y ejecutar campañas mucho más automatizadas, productivas y atinadas.
LinkedIn también se ha convertido en, quizás, el gran portal de búsqueda de trabajo en Internet. ¿Qué les diferencia hoy de otras páginas como Infojobs, Randstad o Adecco?
Cada modelo de negocio ocupa un lugar en el mercado. Nosotros trabajamos con ellos de una forma muy natural. De hecho, todas las compañías que comenta son clientes nuestros, porque también buscan en nuestra plataforma su elemento productivo, en este caso el talento de las personas, para poder servir a sus clientes. En ese sentido, digamos que después de unos primeros años de convivencia y de observación, ahora mismo trabajamos conjuntamente con muchísima naturalidad y cada uno ofrece un ángulo distinto a los clientes. Lo importante es que los clientes tengan diversidad de opciones.
"En el mundo hay ocho personas que se incorporan a un nuevo puesto cada minuto a través de ofertas de LinkedIn"
Vemos nuestra plataforma de identificación y reclutamiento de talento como la más potente del mundo. Entre otras cosas, porque tenemos más de 1.300 millones de perfiles a escala mundial, y eso ya de salida te da una llegada y una amplitud importante. Además, son perfiles verificados en muchos de los casos. Justo acabamos de superar la barrera de los 100 millones de perfiles verificados, lo cual era un reto muy relevante, y ahora queremos alcanzar los 1.000 millones para 2030, porque nos aporta una posibilidad relevante en el mercado que queremos mantener.
Antes le he preguntado por el uso de las empresas por parte de LinkedIn. Pero, ¿cómo ha ido variando el de los empleados y el de aquellos que buscan trabajo a través de la plataforma?
Para nosotros, el momento en el que una persona busca trabajo es un momento crítico, y lo respetamos mucho. Desde el inicio, uno de nuestros objetivos core fue poder ofrecer esas oportunidades. A lo largo de los años, hemos incrementado sus opciones y la visibilidad de su perfil, pero también el acceso a oportunidades. Hay decenas de miles de oportunidades laborales que se pueden visitar simultáneamente en LinkedIn. Pero más allá de eso, hemos incorporado más funcionalidades: desde ensayos de entrevistas a ayudantes para mejorar un perfil, hasta el famoso tab de open to work para abrirse a los a los reclutadores. En el caso de los reclutadores, uno de los factores más importantes de los que disponen es el tiempo de contratación. En este sentido, ayuda que alguien especifique que está abierto a cambiar de trabajo o que tiene una posibilidad de incorporación inmediata.
Bueno, siempre está la eterna pregunta de si esa funcionalidad ayuda o perjudica.
Según nos consta a nosotros, estadísticamente ayuda. Los perfiles de open to work son más visitados que los que no tienen el setup.
En cualquier caso, siempre reflexionamos cómo podemos ayudar en esa paradoja que dice que las compañías no encuentran el talento que necesitan, a la vez que muchas personas no encuentran el trabajo al que aspiran. Intentar conectar o acercar esas dos realidades es nuestra obsesión.

¿Tienen datos de cuántos empleos genera LinkedIn cada año en el Estado?
Tenemos datos a escala global. En el mundo hay ocho personas que se incorporan a un nuevo puesto cada minuto a través de ofertas de LinkedIn. Además, existen 14 millones de puestos publicados simultáneamente. A su vez, cada segundo se incorporan a LinkedIn seis personas en todo el planeta. El crecimiento es cada vez más veloz. Son datos contundentes que ayudan a entender la capacidad y el potencial que te genera una plataforma como la nuestra, especialmente si lo que se compara con lo que se hacía hace décadas. Yo empecé buscando trabajo recortando un anuncio de prensa de las páginas salmón y mandando en un sobre el currículum impreso. El salto cualitativo de acceso a oportunidades es bestial.
Aunque no haya datos en el ámbito estatal, ¿España está por encima, por debajo o en la media que comenta?
Las realidades de los países equiparables al nuestro son muy parecidas. Siempre tendemos a pensar que somos únicos y diferentes, pero las métricas son muy parecidas a las de países de Europa Occidental, Norteamérica y algunos países de Asia. Hay algunos estados que todavía están en una curva de madurez tanto tecnológica como profesional, por lo que aún están un poco rezagados. Además, los datos de crecimiento de negocio de LinkedIn en España son al menos tan buenos como los del resto del planeta, por lo que entendemos que son perfectamente extrapolables a nuestro mercado.
¿Se hacen bien los currículums hoy en día?
Nosotros intentamos potenciar el alcance, y lo significativo de un perfil en LinkedIn es que no es un currículum en sí mismo, porque incorpora otras cosas. Eso de hacerlo bien o no... El profesional tiene la obligación de tener un perfil interesante y atractivo. Eso tiene por lo menos dos componentes: el primero, cómo realmente aterrizas, dibujas y escribes el perfil, mientras que el segundo son más bien las cosas que puedes incorporar a través de tus formaciones, experiencias o demostración de habilidades.
"Las empresas van a entender el talento por las habilidades, y no tanto por categorías más tradicionales como la formación académica o la trayectoria profesional"
Las famosas soft skills. ¿Lo son todo?
Estamos moviéndonos hacia un mundo en el que el talento se va a entender por las habilidades, y no tanto por categorías más tradicionales como la formación académica o la trayectoria profesional. Estas siguen siendo importantes, pero las empresas están buscando entender las profesiones como habilidades, porque es lo que les permite encontrar todo el talento necesario. Los mecanismos tradicionales ya no son lo suficientemente significativos y elásticos, y no generan el alcance que podemos obtener si de verdad consiguiésemos entender a los profesionales como un conjunto de habilidades.
Nuestras estadísticas muestran que los reclutadores no llegan a encontrar al 80% de los candidatos válidos para ocupar posiciones abiertas. Entonces, este es nuestro ámbito de actuación y donde tenemos claramente la oportunidad de ayudar a las empresas a encontrar ese talento oculto o no tan visible.
¿Y cómo se logra eso?
Con tecnología. A través del acceso, de nuestra plataforma tecnológica, de cómo la inteligencia artificial entiende nuestras necesidades y es capaz de mapear profesionales que a lo mejor no sean tan evidentes porque no están en nuestro sector o porque no han estudiado las formaciones clásicas para el sector en el que nos encontramos. Las empresas ya han entendido que tienen que abrir la mente a encontrar otra forma y luego, como segunda parte, es muy importante ver cómo conseguimos adquirir las habilidades y los conocimientos dentro de la compañía.
Todas las empresas saben que es tanto o más importante cuidar a sus empleados como encontrar a los siguientes. Y eso responde, de hecho, también a las prioridades de los profesionales. Históricamente, mantienen una serie de prioridades muy evidentes: el salario, la seguridad que le ofrece su puesto de trabajo y la flexibilidad, que es además un factor que ha elevado su importancia. Ahora, sin embargo, han aparecido dos nuevos factores cuando preguntamos a los profesionales.
¿Cuáles?
El primero son las oportunidades de desarrollo. Un profesional no acepta una propuesta si no entiende que en esa posición y en esa empresa no va a poder desarrollar sus habilidades. Es su garantía y su pasaporte dentro de esa empresa o afuera. Y la otra es el propósito, aunque no soy muy partidario de esa palabra, porque debería contemplar otras cosas. Me gusta más hablar del impacto, es decir, lo que genera nuestra compañía, ya sea porque ayuda a la sociedad en un ámbito o porque cuida la sostenibilidad del medioambiente, etc.
En definitiva, se han casi duplicado el número de prioridades, lo que no hace especialmente sencillo la labor de las empresas de atraer y conseguir el mejor talento, pero sí evidencia la necesidad de que las empresas comuniquen, se expongan y conecten con los profesionales con muchísima más fluidez, riqueza y contenido.

El mercado laboral vive uno de sus mejores momentos en cuanto a cifras absolutas tanto en el Estado como en Catalunya. ¿Qué valoración hacen desde LinkedIn?
Bueno, nosotros vemos un dato objetivo, y es que la población activa crece. Además, creo que las empresas también lo están haciendo, ya que están incorporando nuevo talento, al mismo tiempo que están llegando empresas internacionales a España e igual que las empresas españolas se están internacionalizando.
En Catalunya y en Barcelona existe un ecosistema reconocido de emprendimiento. Una de las dinámicas que estamos viendo en el mercado español es un crecimiento muy alto, por encima del 60%, de los perfiles que incorporan el concepto fundador a su perfil. Es decir, el emprendimiento goza de muy buena salud, y eso es muy buena noticia. Solo en el entorno de Barcelona vemos muchas startups que ya llevan muchos años en el mercado, además de otras que están creciendo y apareciendo. Nosotros publicamos anualmente rankings de Top Startups con una serie de objetivos de crecimiento, repercusión y demás, y vemos como el tejido español en general y el barcelonés o catalán en particular siguen en muy buen estado.
De hecho, está de viaje por Catalunya para visitar a muchas de ellas, ¿verdad?
Sí, son clientes nuestros que fueron startups y que ahora ya deberíamos dejar de llamarlas así porque son grandes realidades. Están muy basadas en la tecnología y la innovación. En el ámbito de Barcelona, ahora mismo están saliendo muy altas en nuestro rankings empresas como Nude Project, de moda urbana; Incapto, de consumo sostenible; Genesy, de inteligencia artificial y de automatización de B2B; Amenitiz, software para hostelería, y Ukio, que es una prop-tech. Muchas de esas startups han apoyado su crecimiento y desarrollo en encontrar talento a través de nuestra plataforma, comercializar sus mensajes y sus productos y, al final, tener una presencia digital relevante.
¿A estos clientes van a buscarlos ustedes o ellos les contactan?
Tenemos los dos modelos. Históricamente, hemos ido haciendo más clientes y hoy en día tenemos miles en España que confían en nuestras soluciones de ambos mundos. Pero, por otra parte, también hacemos acercamiento al mercado para ofrecer nuestras soluciones, como cualquier otra empresa. Actualmente estamos poniendo mucho énfasis en cómo podemos no solo seguir ayudando a las compañías medianas y grandes, sino también cómo ayudar a la pyme, que son una realidad indiscutible. Ahora están llegando a entender qué posibilidades tienen de encontrar ellos también su talento, su desarrollo y su comercialización de nuestra plataforma. Probablemente, las pymes son una de nuestras apuestas más importantes a futuro.
"El profesional que se incorpore hoy al mundo laboral tendrá entre trece y dieciséis etapas profesionales diferentes, el doble o triple que generaciones anteriores"
Volvamos al mercado laboral. El desempleo juvenil del Estado continúa siendo el más elevado de la eurozona. ¿Cómo puede ayudar LinkedIn a mejorar esta realidad?
En la misma línea. Ayudamos a los profesionales jóvenes a entender el contexto industrial, sectorial y profesional al que se enfrentan. En este sentido, trabajamos para que los miembros más jóvenes se incorporen en una etapa casi preuniversitaria o universitaria, y que no piensen que LinkedIn solo es para el momento en el que tienen que buscar trabajo, sino que pueden generar una red y acceder al conocimiento de un sector o de las empresas.
Más tarde, ya en el momento en el que se lanzan a buscar oportunidades, les damos acceso y visibilidad de muchas oportunidades. Por nuestra parte, tenemos que entender las prioridades que le enumeraba antes, pero también su realidad. Y su realidad es que el profesional que se incorpore hoy al mundo laboral probablemente tendrá entre trece y dieciséis etapas profesionales diferentes de media. Es decir, duplicarán o triplicarán las de las generaciones anteriores. Es un dato que tienen que manejar las empresas y los profesionales para comprender cuáles son las expectativas.
En esta misión que tienen de penetrar entre la audiencia joven, ¿cómo se consigue competir como red social contra monstruos del entretenimiento joven tan potentes como TikTok e Instagram?
A veces hay que tener más consenso sobre qué es interesante y qué es importante. En mis primeros años en la compañía, yo iba a una universidad y preguntaba quién tenía perfil en LinkedIn y se levantaban pocas manos. Eso ahora ha cambiado. Ahora si nos llaman, acudimos. Tenemos una responsable en España y Portugal para todo el mundo académico. Estamos presentes en universidades y en escuelas de negocio con bastante frecuencia. Incluso muchos de nuestros empleados, yo incluido, podemos tener un aspecto académico también docente.
LinkedIn es una de las pocas redes sociales grandes sin incorporar idiomas como el catalán o el euskera. ¿Hay alguna previsión de hacerlo pronto?
Nosotros tenemos los recursos que tenemos y no cubrimos todos los idiomas del planeta. Intentamos priorizar aquellos que están más extendidos. Desde luego, no limitamos la posibilidad de capacidades de escritura y de creación de contenido en ninguno de esos idiomas. Seguramente, en el futuro consideraremos esto menos relevante, porque la tecnología nos está ayudando a poder comunicarnos en el idioma que queramos. De hecho, ya existe la tecnología mediante la cual podemos tener una conversación inmediatamente y simultáneamente traducida, incluso con el mismo tono de voz. Así que creo que será la propia tecnología la que eliminará, o por lo menos disminuirá mucho, ese posible conflicto de lenguas.
Es decir, que la incorporación de estos idiomas no está prevista.
No tenemos constancia de que vayamos a ampliar el número de idiomas.
"¿Incorporar el catalán a LinkedIn? No tenemos constancia, será la propia tecnología quien eliminará el posible conflicto de lenguas"
¿El hecho de que el catalán o el euskera no estén incorporados a LinkedIn supone un problema para que aparezcan algunas publicaciones en el feed, al no detectarlos como idioma?
Ese es un tema muy técnico. Al final, la repercusión de un contenido se produce a partir de la audiencia en la red a la que va dirigido y al movimiento del éxito que tenga dentro de esa red. Sinceramente, no le sé decir si es así, pero a mí me salen publicaciones de mis colegas en sueco y yo no lo hablo. Me aparecen porque son de mi red e interactúo con ellos.
De cara al 2026, ¿nos puede avanzar alguna novedad relevante de LinkedIn?
Mucho del trabajo de este 2025 ha sido ayudar a las empresas y los profesionales a entender cuáles son los nuevos mecanismos de trabajo en la plataforma, fundamentalmente en cuanto a su presencia, publicación, formatos, profundidad de contenidos... Creo que lo que vamos a ver en 2026 es esa gran concurrencia. Es decir, cómo realmente nuestra plataforma va a intentar, y espero que conseguir, poner los contenidos de más valor para los miembros más visibles, más accesibles y más exitosos. 2026 será un año en el que intentaremos primar sin duda la calidad sobre la cantidad.