Exdecano del Colegio de Economistas de Catalunya

Energías renovables: España bien, Catalunya no

25 de Junio de 2025
Francesc Raventós | VIA Empresa

La conferencia de las Naciones Unidas sobre el cambio climático reunida en París en 2015, estableció como meta mantener el aumento de la temperatura global del planeta por debajo de los 2 °C a finales de este siglo con respecto a los niveles preindustriales.

 

El aumento de la temperatura se debe al efecto invernadero causado, sobre todo, por las emisiones de CO₂ por el uso de combustibles fósiles (carbón, petróleo y gas) para generar energía.

Para evitar el calentamiento, la Unión Europea (UE) se comprometió a tener en 2050 una economía climáticamente neutra con cero emisiones netas de gases de efecto invernadero. Para lograr la descarbonización de la economía e incrementar la independencia energética, la UE está impulsando el uso de la energía eléctrica procedente de fuentes renovables.

 

Con la invasión de Rusia a Ucrania, se ha visto la gran dependencia que la UE tenía del petróleo y gas de Rusia y la necesidad de reducir primero y eliminar después esta dependencia. Así, la UE aprobó el plan REPowerEU –basado en tres pilares: ahorro de energía, producción de energía limpia y diversificación de las fuentes de aprovisionamiento– y fijó un nuevo objetivo: en 2030 habría que haber reducido las emisiones de CO₂ al menos en un 55%. Cabe decir que en 2024, la participación de la energía renovable sobre el total de la generación eléctrica en la UE alcanzó el 48,4% de la energía eléctrica producida, o sea, que parece que se va por el buen camino.

"Después de Alemania, España es el segundo país europeo productor de electricidad con energía solar y eólica, por delante de países como Francia, Italia, Noruega o Suecia"

En España, el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2023–2030 fija como objetivos que en 2030 el 81% de la generación eléctrica se obtenga mediante energías renovables y que el 48% en el uso final total de la energía que consumen los consumidores provenga de las energías renovables. Como se ve, España es aún más ambiciosa que la UE.

En 2024, la generación de electricidad procedente de energías renovables alcanzó la cifra récord de un 56,8%, superando el objetivo de la CE. Después de Alemania, España es el segundo país europeo productor de electricidad con energía solar y eólica, por delante de países como Francia, Italia, Noruega o Suecia, convirtiéndose así en un referente internacional en el campo de las energías renovables, con precios sustancialmente más bajos que en los países que aún dependen en gran medida de los combustibles fósiles o de la energía nuclear. Es un aspecto clave para mejorar la competitividad.

En Catalunya, en 2024, las fuentes de energía renovable representaron el 16,2% del total de la demanda, mientras que las fuentes no renovables supusieron el 68,8% de la demanda, de la cual la nuclear representa alrededor del 50%.

"En proporción al peso económico que tiene Catalunya en España, un 19% del PIB y un 16% de la población, este exiguo 4,5% en energías renovables nos hace dependientes de la energía de las otras comunidades"

En España, las instalaciones de energía renovable representan el 66% del parque generador de energía eléctrica. Catalunya solo aporta el 4,5% de las instalaciones de energía renovable, mientras que comunidades como Castilla y León, Castilla-La Mancha y Andalucía aportan cada una más del 15% del total. En proporción al peso económico que tiene Catalunya en España, un 19% del PIB y un 16% de la población, este exiguo 4,5% en energías renovables nos hace dependientes de la energía de las otras comunidades –especialmente de Aragón– y supone una contribución poco solidaria con el objetivo de lograr en 2050 que la UE sea un espacio con neutralidad climática.

Además, este bajo nivel de instalaciones de energía renovable en Catalunya hace aumentar el precio de la luz, encareciendo la energía de los hogares y perjudicando la competitividad de las empresas. Afortunadamente, parece que ahora la Generalitat quiere poner remedio y ha declarado de interés público las instalaciones de fuentes renovables de energía, lo que facilitará tramitar las autorizaciones. De momento todo está solo sobre el papel. Veremos.