Hace ya más de un año que el BBVA presentó una OPA hostil para absorber el Banc Sabadell. Lo he ido comentando a menudo en VIA Empresa. Es el segundo intento del BBVA de absorber el Banc Sabadell. El primero fracasó. Esta obsesión pone de manifiesto la inexistencia de un plan de acción a medio y largo plazo por parte del BBVA, ya que parece que todo se reduzca a la absorción del Banc Sabadell. La dependencia de los mercados mexicano y turco que tiene el banco presidido por Carlos Torres es consecuencia de decisiones estratégicas equivocadas tomadas por ellos mismos, y pretenden equilibrar su balance absorbiendo el BS. Lo hacen, además, de manera hostil y sin ninguna empatía hacia los accionistas del Banc Sabadell, que más bien han sido tratados casi de ignorantes.
¿Qué ha conseguido hasta ahora la OPA presentada? Pues, sencillamente descarrilar. Esta OPA ya no tiene sentido, sobre todo después de la resolución aprobada por el Consejo de Ministros. El BBVA debe concretar la oferta ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV); hasta que esto suceda desconocemos cómo reformulará su propuesta. Partimos, pues, de cero: comienza un nuevo partido donde el Banc Sabadell, que sí que tiene estrategia a corto, medio y largo plazo, pondrá de manifiesto que es más rentable, útil y eficiente manteniendo su independencia.
Mientras tanto, una cosa queda clara, y es la confianza de los accionistas del Banc Sabadell con su consejo de administración y una opinión pública que rechaza claramente las intenciones del BBVA. Cinco gobiernos autonómicos han manifestado su rechazo a la OPA y de la misma manera se han pronunciado la mayoría de grupos parlamentarios, tanto en el Parlamento de Catalunya como en el Congreso de los Diputados.
Mantener la OPA en estas condiciones es un grave error que viene a sumarse a los muchos cometidos hasta ahora por la entidad opante. No tener complicidades sociales no augura nada bueno para el BBVA en Catalunya. Una publicidad engañosa es muy contraproducente, prometiendo la luna y desconociendo la compenetración entre el accionista y cliente, a la vez, del Banc Sabadell. El desconocimiento de todo esto es un indicador muy determinante para rechazar la OPA. Difícilmente encontraríamos en el BBVA el sentimiento de pertenencia que hoy tenemos con el Banc Sabadell.
"Una publicidad engañosa es muy contraproducente, prometiendo la luna y desconociendo la compenetración entre el accionista y cliente, a la vez, del Banc Sabadell"
No hace falta insistir en el hecho de que el precio y las condiciones hasta ahora propuestas por el BBVA no tienen ningún atractivo. Veremos cómo concreta ahora la oferta para iniciar el proceso para que nos pronunciemos los accionistas de BS. Visto el tono y las maneras del BBVA, ya anticipo que nunca aceptaré una oferta proveniente de este banco. Los casi ciento cincuenta años del Banc Sabadell auguran un futuro de éxito.