Parte del equipo de Caelis abre Imprevisto Restaurant

Alberto Jaime León (ecuatoriano), Raffaele D’Avico, Luca Pinna e Isabella Vivarelli (italianos) son los cuatro amigos al frente de Imprevisto Restaurant. Se conocieron en el Caelis de Romain Fornell y, con el peso de la pandemia sobre las espaldas, vieron la posibilidad de armarse de valor y abrir un restaurante propio en la ciudad que les acogió y ya sienten como propia. La aventura acaba de cumplir los dos meses de rodaje (calle Bailén, 104) y tiene visos a colarse en más de una lista de imprescindibles del Eixample.

“Lo de improviso viene porque siempre andaban saliendo cosas que no habíamos previsto ni pensado o replanteamientos no buscados”, explica Alberto, al frente de la sala del pequeño establecimiento de apenas 100 metros cuadrados donde antes se encontraba una hamburguesería. Acometieron una reforma parcial, aprovechando la cocina y “todo lo aprovechable”. “Buscamos local en pandemia y nos costó al final encontrar algo aquí porque los traspasos ya no son tan baratos”, avanza.

El nuevo local sube la apuesta (y mucho) en una zona donde es francamente difícil encontrar un menú degustación con precio tan controlado. Trabajan un completo menú de mediodía a 21 euros con vino a copas, que puede ampliarse (a 4 platos por 28 euros) y por las noches a dos menús degustación más que atractivos (36 y 50 euros).

Las nutridas trayectorias en el sector de la restauración del cuarteto se dejan ver en los elegantes emplatados, en la selección de los ingredientes de temporada y en una puesta en escena nada pretenciosa. El local tampoco lo es.

El nuevo local sube la apuesta (y mucho) en una zona donde es francamente difícil encontrar un menú degustación con un precio tan controlado

Entre los entrantes del menú más amplio, un cremoso ajo blanco de textura juguetona salpicado con un tartar de mejillones, tomates y almendra tostada picada o un tartar de vaca y anguila ahumada aliñado con apio encurtido y una suave mayonesa de raifort que liga todo el conjunto. Impecables la terrina de conejo y pistacho con radicchio y vinagreta de saba (mosto cocido de las uvas), una col china marcada en una mini Kamado acompañada con un suave beurre blanc de pomelo salpicada con trigo sarraceno y lima kefir, y el risotto de limón alga nori y botarga. Entre los dos postres, higos con vainilla y una torrija afogata en un tiramisú. El detalle en la elección de proveedores pasa por el pan del maestro Xavi Barriga (Turris) para mojar en el aceite de edición limitada (950 botellas) y variedad Corbella que embotellan en la bodega Abadal.

La apuesta por los riesling

La carta de vinos es otro acierto. ¿Un riesling a copas? Es aquí. Las referencias se mueven entre las DO catalanas, una gran presencia de interesantes Riojas y vinos gallegos. A  Alberto le encantan los riesling y, en general, el vino francés y alemán y eso se nota a la hora de aconsejar y proponer. “Tenemos la idea de que beberte un buen vino no ha de ser algo muy exclusivo. Proponemos un menú muy ajustado y, si te animas un poco más porque la experiencia te está gustando, puedes pedir una botella, que sea una sorpresa agradable”, detalla el sumiller, y añade: “hay intención de ir variando siempre la parte líquida”.

Jaime León: “Tenemos la idea de que beberte un buen vino no ha de ser algo muy exclusivo"

A escasas calles de Passeig de Gràcia o haciendo el trayecto de bajada desde Verdaguer y atravesando la Avinguda Diagonal, Imprevisto Restaurante tiene todos los números para ser una de las aperturas de la temporada. Un lugar donde pueden relajarse los clientes habituales de las mejores mesas de hotel y también los que salen a comer mirando siempre no agujerear la cartera. Una de esas ofertas esperadas que lleva la cocina de autor a la mesa a un precio más que competitivo. Una experiencia para repetir.