Economista formado en la Universitat Pompeu Fabra, con especialización ejecutiva en ESADE y un máster en Dirección Estratégica y Comunicación Empresarial por la Universitat de Vic, Jordi García Brustenga ha construido un perfil sólido que combina rigor analítico y capacidad de relato. Este mes de julio ha sido nombrado secretario de Estado de Industria, en sustitución de Rebeca Torró. Como nuevo actor clave en el tablero industrial español, ha sido invitado al último episodio de La indústria és futur, el pódcast de la Fundació per la Indústria, que reúne a algunos de los empresarios más influyentes del sector para recoger sus reflexiones durante una entrevista en profundidad.
Esta vez, el periodista económico Umberto Salerno, ha dialogado con García Brustenga para desplegar un conjunto de ideas sobre el momento actual que vive Europa, marcado por la redefinición industrial, la digitalización, la transición verde y las tensiones comerciales globales. El gobierno español, mientras tanto, trabaja en una nueva ley de industria estratégica que aspira a ser el punto de inflexión.
De entrada, el secretario de Industria ha reconocido que vivimos un momento de incertidumbre, "pero también de oportunidades", ha querido destacar. Lejos de caer en el pesimismo, García Brustenga ha subrayado que el Estado registra más proyectos de inversión que síntomas de crisis, un indicador que refuerza la confianza en el futuro."Y debemos creernos que somos una potencia industrial de Europa", ha sentenciado. Por eso ha reivindicado que la automoción, la química o las renovables son ámbitos donde España ya tiene capacidad de liderazgo, y que el vehículo eléctrico es la prueba más tangible.
Esta convicción se ha acompañado de una visión a largo plazo que busca romper viejas inercias. “El modelo industrial español debe estar basado en tecnología y sostenibilidad”, ha remarcado. “No podemos ser la fábrica de lo que nadie quiere. Debemos ser punteros en tecnología e innovación”, ha destacado, y ha hecho referencia a su apuesta clara por empresas "campeonas y tractoras" que arrastren "ecosistemas generosos y saludables", con arraigo territorial y capacidad de atraer talento.
En esta misma línea de transformación, García Brustenga ha querido vincular la innovación con la sostenibilidad. “No queremos volver al coche de combustión: la descarbonización es nuestro camino”, ha asegurado, a pesar de reconocer las dificultades. Al mismo tiempo, ha insistido en que España avanza en regulación e incentivos para acelerar la descarbonización. “Es un esfuerzo compartido entre públicos y privados, pero nos llevará hacia un lugar donde muchos otros países aún no han llegado".
El modelo industrial español a diez años vista
Cuando ha sido preguntado por Salerno sobre un horizonte del sector a diez años vista, García Brustenga ha considerado que el futuro debe pasar por una gobernanza compartida. "Si hemos conseguido aprobar la nueva ley de industria, esta ha buscado coordinar ministerios, universidades y sectores energéticos para detectar carencias de talento y orientar políticas de manera formal", ha explicado el secretario. Además, ha subrayado la necesidad de hacer de la industria un espacio atractivo para las nuevas generaciones.
Lo ha ejemplificado con iniciativas como el Talent Day en el Circuit de Montmeló, en el que miles de jóvenes han podido conocer de cerca empresas clave del sector automovilístico, o con proyectos que han industrializado viviendas mediante robótica e inteligencia artificial. Experiencias que "han demostrado que la industria ha sido sexy e inspiradora, capaz de ofrecer trayectorias profesionales con futuro para una nueva generación de talento".
Regulación, autonomía estratégica y mercado abierto
En términos de regulación, el secretario de Estado ha defendido que esta no sea un freno, sino una garantía. Las empresas que han hecho la apuesta normativa no pueden quedar en desventaja, y por eso ha reclamado vigilancia del mercado y penalizaciones a los productos que no cumplan.
García Brustenga: "No queremos cerrar fronteras ni escalar aranceles. Queremos fomentar el libre comercio, pero con reglas claras"
Su visión ha sido la de una autonomía estratégica abierta: “No queremos cerrar fronteras ni escalar aranceles. Queremos fomentar el libre comercio, pero con reglas claras.” En este sentido, el pasaporte digital se ha presentado como una herramienta clave para reducir la burocracia y aportar más trazabilidad y circularidad en un mercado único europeo más eficiente.
Talento, inversión y fondos Next Generation
La conversación en el pódcast también ha transitado por el terreno del talento y la inversión, dos ejes que García Brustenga ha considerado inseparables de la política industrial. Lo ha sintetizado con una idea provocadora: “Es mejor tener falta de talento que exceso de paro.” El reto, ha añadido, es tecnificar, robotizar y automatizar para actualizar perfiles y hacer coincidir oferta y demanda.
La colaboración público-privada es, para él, indispensable: la regulación pública debe encajar con la dinámica privada, o la industria no tendrá fuerza. En paralelo, los fondos Next Generation marcan la agenda inmediata. “Invertiremos cada euro asignado antes de junio del año que viene, con convocatorias prioritarias en los sectores automovilísticos, agroalimentarios, navales y farmacéuticos”, ha concluido.