El primer de septiembre de 2023 escribimos un artículo sobre la identidad de los propietarios de los clubes de fútbol español, y al llegar al Cádiz CF decíamos lo siguiente: “Otra entidad del sur es el Cádiz, que tiene como máximo accionista (65%) una sociedad llamada Locos por el balón, propiedad a partes iguales de Manuel Vizcaíno Fernández (economista, 1965) y David García Buitrago (mano derecha durante muchos años del agente de futbolistas Quique Pina). Los problemas legales propiciaron que la justicia ordenara hace un par de años la disolución de esta sociedad, de modo que cuesta mucho saber en qué situación han quedado sus acciones en el club de fútbol gaditano. En todo caso, Vizcaíno es el actual presidente de la entidad. Otro accionista relevante es Rafael Fernández Bernal (26%) y recientemente se produjo la entrada del inversor americano Ben Harburg, que adquirió el 6% del capital”.
Han pasado más de dos años, y la situación es más o menos la misma, con la sociedad matriz del club, esa que lleva el estrambótico nombre de Locos por el Balón, en proceso de liquidación, tal como consta en el registro mercantil. Pero esta realidad tan inverosímil no ha sido obstáculo para que el Cádiz CF haya sacado a cotizar en bolsa -ni más ni menos que en el Nasdaq- una filial llamada Nomadar, que aparentemente se dedica al negocio tecnológico aplicado al deporte.
El Cádiz CF ha sacado a bolsa una filial llamada Nomadar, que aparentemente se dedica al negocio tecnológico aplicado al deporte
Esta historia tan curiosa como es comienza en febrero de este año, cuando el club de fútbol andaluz publicó una declaración asegurando que sacarían al mercado la filial Nomadar con la previsión de que acabara cotizando en el Nasdaq. También afirmaban que la operación estaría liderada por la firma americana Clear Street y que en el consejo de administración figuraba el antiguo CEO del Liverpool FC Peter Moore. Con el paso de los meses, el proyecto fue consolidándose hasta que el pasado 30 de octubre, el presidente del club, el mencionado Manuel Vizcaíno, escribió una carta abierta a los socios de la entidad amarilla comunicándoles que Nomadar ya salía a bolsa.
La firma Nomadar, que según la información del Registro Mercantil español hasta ahora era en realidad una marca de la sociedad Sport City Cadiz, SL, ahora pasará a ser una filial de esta sociedad (antes de la salida a bolsa poseía la totalidad del capital, pero con una dilución de la propiedad una vez las acciones han comenzado a cotizar). Se dedica fundamentalmente a los programas de entrenamiento de alto rendimiento, lo que ellos llaman HPT. Lo que se desprende de su información corporativa es que trabajan en colaboración con una red muy amplia de clubes profesionales de fútbol, academias y universidades de gran prestigio de todo el mundo. Los participantes en sus programas tienen acceso exclusivo a instalaciones de élite, a recursos avanzados y a oportunidades de estar en contacto con profesionales del fútbol de alto nivel.
Las cuatro patas sobre las que se apoya su modelo son la innovación, el entrenamiento integral, la dualidad digital-físico y el desarrollo de la persona, tanto en lo que respecta a las habilidades como en el conocimiento. Adicionalmente a esto, también explotan la marca Mágico González, que hace referencia a un antiguo jugador del club de origen salvadoreño. Los últimos datos de negocio de la compañía son de 2023, y muestran una cifra de negocio ligeramente por debajo del millón de euros y con un resultado positivo de unos 25.000 euros. Hay que suponer que el nuevo proyecto resultará mucho más ambicioso. Si repasamos la información que facilita Nasdaq (National Association of Securities Dealers Automated Quotations), desde el punto de vista formal, la compañía que ha salido a bolsa se llama Nomadar Corp y tiene su sede en Texas (Estados Unidos).
Finalmente, el pasado 31 de octubre se produjo el esperado debut en el parqué electrónico del Nasdaq Capital Market, bajo el código NOMA. El acto protocolario en la ciudad de Nueva York fue comme il faut, con campana incluida. El encargado de hacer sonar la campana fue Rafael Contreras Chamorro, CEO de Nomadar y vicepresidente del Cádiz CF. En su discurso de presentación dijo que “Nomadar, como brazo de la innovación del Cádiz CF, está posicionada de manera singular para capitalizar la confluencia de los deportes, la salud, el entretenimiento y el turismo, sectores que conjuntamente representan más de un billón de dólares en oportunidades de mercado. Estamos muy emocionados por el hecho de empezar a cotizar en el Nasdaq, una situación que nos permitirá abrir nuevas oportunidades para potenciar nuestro crecimiento”. La realidad es que el debut no resultó tan brillante como el futuro que Contreras augura a la compañía, porque la caída del precio de las acciones respecto a la valoración inicial resultó muy contundente: solo en la jornada inicial el precio de los títulos declinó un 45%. Los siguientes días el panorama no mejoró, y el mercado vio cómo unas acciones que habían salido a 30 dólares, caían a cierres diarios por debajo de los 9 dólares.
Solo en la jornada inicial el precio de los títulos declinó un 45%
El procedimiento escogido para la salida a bolsa se conoce como direct listing o cotización directa, que tiene menos costes que las habituales OPV u OPS. De entrada, no sirve para que la empresa refuerce sus fondos propios, sino que está pensado como ventana para que los accionistas iniciales puedan vender. Se espera que en un futuro se realice alguna ampliación de capital que sí permitiría que el negocio viera cómo se incrementan los fondos propios. Sea como sea, este proceso resultará un experimento interesante para ver si un club pequeño, como es el caso del Cádiz, es capaz de convencer a inversores de todo el mundo respecto a las bondades de su proyecto formativo.