Las elecciones a la Cambra de Comerç de Barcelona están en plena ebullición. Juego de Truenos, baile de sillas... Que cada cual le llame cómo quiera. En el pleno de la Cambra de Barcelona hay un total de 60 vocalías, de las cuales 40 se disputarán por votación electrónica (remota y presencial) entre el 2 y el 7 de mayo y el 8 de mayo, respectivamente. Un total de 192 candidatos que aspiran a convencer un censo de 423.146 potenciales electores que incluye autónomos, pequeñas, medias y grandes empresas.
La cursa cameral barcelonesa se corre a cinco bandas. Hay tres listas con un candidato presidenciable cómo es el caso de Enric Crous (exdirector general de Damm y Cacaolat), Carles Tusquets (presidente de Trea Capital y Banco Mediolanum en España) y Ramon Masià (abogado y economista). Pero, también hay la lista de empresarios independentistas que cuenta con el apoyo de la Assembea Nacional Catalana (ANC) y el Cercle Català de Negocis (CCN) así como las mujeres de la Associació 50a50 que también apuestan por no presentar un candidato presidenciable y decidir en función del resultado electoral. La mayoría de epígrafos cuenta con cuatro o més candidatos.
Sin embargo, más allá de los 40 principales que saldrán de las urnas electrónicas, el pleno de la Cambra de Barcelona está formado por 20 miembros más que también cuentan y mucho: 14 sillas reservadas a las empresas que aportan al menos 75.000 euros por año al ente cameral y 6 sillas más a propuesta de las patronales. En la lista de empresas con más aportación voluntaria hay: Abertis, Banco Sabadell, Banco Mediolanum, CaixaBank, Criteria Caja, Deloitte, Indra, Magma diseño, Naturgy, PwC, Promotora Kasde (Catalonia Hotel & Resorts), Racc, Damm y la Sociedad General de Aguas de Busot de Barcelona.
Pau patronal a la Cambra?
En cuanto a las organizaciones empresariales, la disputa será reñida y es que a diferencia de cómo se había hecho anteriormente, Pimec y Foment del Treball/Fepime se han presentado por separado. Hay 6 vocalías y 12 candidatos: José Maria Torres, Emili Rousaud, Martina Font, Maria José Tarancón y Josep Ignasi Hornos por parte de Pimec y Santiago García-Nieto, Jaume Roura, Elisabeth Trallero, Anna Cornadó, Joan Canals y Francina Valls por parte del tándem formado por Foment y Fepime.
Todo parece indicar que la guerra patronal entre los órganos de gobierno ahora capitaneados por Josep González (Pimec) y Josep Sánchez-Libre (Foment) se ha saldado con un (pre)acuerdo por la representatividad del 42% y el 58%, respectivamente. Un pacto que a pesar de poner punto seguido o final a años de desavenencias y disputas judiciales entre oganitzacions empresariales no ha llegado lo suficientemente pronto como para cerrar una lista conjunta a las sillas patronales de la Cambra de Barcelona. "No han llegado a un consenso por los asientos que les corresponden", se apunta en un comunicado oficial. En este caso, las elecciones tendrán lugar el 5 de junio.
Pimec ya ha escogido bando: "Tanto Crous como Torres son buenos gestores, representarán muy bien el tejido de pymes y serán capaces de transformar la Cambra que necesita una visión más empresarial que política".
17 años después...
Una vez se conforme el pleno, sólo quedará pendiente escoger el comité ejecutivo integrado por el presidente, los tres vicepresidentes, el tesorero y siete vocales. Así pues, Miquel Valls pondrá punto y final a los casi 17 años (con cuatro de prórroga) que ha presidido la Cambra de Comerç de Barcelona.
"Si tú no votas, nada cambiará", aseguran desde la candidatura conjunta de Enric Crous y José Maria Torres. "Por los apoyos que tenemos tenemos que ganar", reivindica Tusquets. "No tenemos grandes corporaciones detrás, ni cotizamos en el Ibex 35", presume Masià. "Una lista con un presidenciable tenía sentido antes porque sólo se presentaba una candidatura. Ahora no", critica Joan Canadell, fundador de Petrolis Independents. "Se coloca gente por amiguismes y favores, pero no por meritocracia", espeta Carol Daunert, portavoz de 50a50.
Juego de Truenos, baile de sillas, fuego cruzado de declaraciones... De nuevo, que cadauno le llame cómo quiera. Pero, sobretodo, que gane la Cambra.