Exdirectora de VIA Empresa

Pepe Mujica y 10 reflexiones para vivir “ligero de equipaje”

14 de Mayo de 2025
Act. 14 de Mayo de 2025
Elena Busquets

Ayer justo comía con un colaborador de VIA Empresa, un economista, un hombre como es debido, aparentemente serio y de números, con grandes proyectos empresariales e investigaciones encima, pero buena parte del encuentro estuvimos hablando sobre la vida y la muerte, sobre el duelo y sobre la buena suerte que tenemos tantas veces -y que no somos capaces de ver cuando la tenemos delante-; hablamos sobre metafísica, y sobre todo aquello que no vemos a simple vista, pero que existe y que, de hecho, es más importante que lo que tenemos delante. También hablamos de economía, por supuesto.

 

Hace dos semanas me reunía con un proveedor. Este, CEO de una empresa informática. Hablamos un buen rato sobre la saturación digital con la que vivimos por culpa de los teléfonos móviles, ordenadores y relojes inteligentes que nos acompañan todo el día. Sobre la imposibilidad de estar siempre disponible, de responderlo todo, y sobre la filosofía con la que intentamos quitarnos esta carga de responsabilidades que, cuando se convierte en digital -y por tanto 24/7- puede hacer que nos olvidemos de lo que es importante de verdad: vivir. Y sí, también hablamos de métricas, diseño y desarrollos web. 

Todos, absolutamente todos, queremos lo mismo: vivir y ser felices. Y hacer el bien. Y ser libres. Tanto el economista que contempla todo aquello que los números no dicen, como el informático que anhela y valora todo aquello que tan sólo se experimenta alejado de la pantalla y de los algoritmos. Ya lo dijo Pepe Mujica -de quien nunca más podremos hablar en presente- “ser libre es gastar la mayor cantidad del tiempo de nuestra vida en aquello que nos gusta hacer”. Y ayer 13 de mayo, Pepe Mujica, expresidente de Uruguay, “el revolucionario tranquilo”, perdió su vida con 89 años, su tiempo, pero su discurso revolucionario, sincero e inspirador y su estilo de vida austero -supongo que todos hemos visto su casa- nos dejan una serie de reflexiones que, ojalá, acompañen e iluminen la humanidad durante mucho tiempo.

 

Antes de las reflexiones, pero, cuatro pinceladas clave sobre su vida: Mujica es una figura icónica de la izquierda a escala mundial. Es conocido, de hecho, con el sobrenombre de “el presidente más pobre del mundo”: no sólo renunció al 90% de su sueldo para destinarlo a causas sociales, sino que decidió vivir en una granja humilde, en vez de en la residencia presidencial. Pero antes de su mandato como presidente de Uruguay, cargado de reformas progresistas y marcado por una vida austera, Mujica tuvo otra vida: la de la militancia en el Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros y los años de cautiverio bajo la dictadura militar. Pasó 15 años en prisión, en diferentes tandas. Muchos de estos años los pasó en condiciones extremadamente duras -en un pozo de poco más de un metro-, y con largos períodos de aislamiento. De hecho, en uno de sus cautiverios domesticó ranas y alimentó ratones “para no volverse loco”. También recibió hasta 6 disparos de bala, y también protagonizó una fuga masiva de la prisión de Punta Carretas, en la cual hasta 111 prisioneros escaparon por un túnel.

Lo he dicho, sólo eran cuatro pinceladas, pero su vida es para leerla con detenimiento, como sus discursos.

Ahora sí, las 10 reflexiones prometidas:

  1. “No soy pobre, soy sobrio, liviano de equipaje, vivo con lo justo para que las cosas no me roben la libertad”.
  2. "Pobres no son los que tienen poco. Son los que quieren mucho. Yo no vivo con pobreza, vivo con austeridad, con renunciamiento. Preciso poco para vivir".
  3. "El poder no cambia a las personas, sólo revela quiénes verdaderamente son".
  4. "No se vive de nostalgias, ni de recuerdos, sino de porvenir".
  5. "Lo inevitable no se lloriquea. Lo inevitable hay que afrontarlo".
  6. "Enfrentamos el sedentarismo con caminadores, al insomnio con pastillas y a la soledad con electrónica".
  7. "Pertenezco a una generación que quiso cambiar el mundo, fui aplastado, derrotado, pulverizado, pero sigo soñando que vale la pena luchar para que la gente pueda vivir un poco mejor y con un mayor sentido de la igualdad".
  8. “Para vivir hay que tener libertad. Y para tener libertad hay que tener tiempo”.
  9. “Estamos construyendo una civilización de personas que se autoexplotan. Dedican la mayor parte de su bien más preciado, el tiempo, a trabajar para saciar un consumo que siempre aumenta. Es un sistema absurdo que te empastilla para poder dormir."
  10. "Dénle un sentido, un contenido, a su existencia. porque si no lo hacen conscientemente, el sentido acabará siendo la cuota que tienen que pagar cada fin de mes por el nuevo cacharro que tienen que comprar, y así sucesivamente y ucrónicamente hasta el fin de vuestros días; hasta que un día, los huesos no se levanten y ya no quede de ti ni el recuerdo ni el aliento". 

Y su aliento ya no está, pero sí su recuerdo, y sus reflexiones. Conozco a una que, cuando los golpes o el ruido no la dejan vivir tranquila, a menudo recurre a sus discursos y reflexiones para volver a poner bien la brújula del día a día.

Ahora sí, descanse en paz, Pepe Mujica. Y gracias.